sábado, 13 de junio de 2009

... Todo fue un sueño ...
Cuando me dejó Rob en la puerta de casa, cuando me fue acompañar, despues me subi hacer los deberes y me dormí, todo lo que había pasado, el beso, sus palabras, sus ojos, todo era mentira, todo habia sido un sueño, entonces cuando me quise dar cuenta ya era hora de cenar y no vi el anochecer, fue la primera vez que no vi el anochecer, me sentía rara, insadisfecha, intranquila, insegura, mas nerviosa de lo normal, era muy raro porque no me sentia bien. Cuando mi madre me llamó a cenar bajé rapidamente de un salto y derrepente ya estaba allí. Mi madre me notó rara, más intranquila de lo normal y ella me preguntó:
- ¿Qué te pasa Altzu?
- Nada...
- Te conozco hija, te pasa algo, cuéntamelo.
- ¡No hay nada que contar mamá!
No quería que se preocupase ni mucho menos que me llenase de preguntas y más preguntas, pero ella derrepente dijo:
- Altzu, ya se lo que te pasa, soy tu madre, lo se todo, bueno todo no, pero bastante si.
- ¡Mamá quiero cenar tranquila!
- No, hasta que me cuentes porque no veas un anochecer, no eres incapaz de ser feliz, aunque el día te haya sonreido más de lo normal, o que por culpa de no verlo, te encuentres muy mal.
- ¡Mamá! ¿ Es que no lo entiendes?
La grité lo más que pude, porque ella sabia porque y me seguia preguntando. Ella asustada me insistió.
- Altzu, todo en la vida se supera, absolutamente todo.
- No lo creo así, mamá
- Tu padre estará orgullosa aunque no hayas visto un solo anochecer, te seguirá queriendo.
- Mamá, no es solo eso. La muerte de papá me hizo más devil, mucho más de lo que era antes, tu sabes que desde bebé no me he perdido ni un solo anochecer en mi vida, ni uno. El collar que llevo en el cuello que me dió papá, antes de morir, indica la luna y el anochecer, el amor y la armonia, todo lo que me ayuda a superar la muerte de papá, le prometí, que aunque el no estuviera para obligarme a ver el anochecer, los vería y no me perdería ni uno. El anochecer me ayuda ha pensar, a desaogarme y me hace más fuerte, aunque no se lo potente que puede ser esa fuerza, pero me hace ser feliz y un solo anochecer que no veo, peor me siento mamá, mañana no sará lo mismo.
Me subí a mi cuarto, llorando, porque aunque con esto me desaogué algo, no lo superé del todo.
Mamá subió al cuerto, después de un rato, acababa de fregar los platos, y tenía las manos mojadas, pero el agua me gustaba y no dije nada. Ella me acarició con sus manos húmedas y suabes y me dijo con voz suabe:
- Seguro que papá estara orgullosa de ti, seguro.
Esta vez la creí, porque lo dijo con entusiasmo y confianza. La sonreí y me dí la vuelta para dormir y ella me cerró la puerta de mi cuarto con mucha delicadeza y me apagó la luz.
Esa vez me hizo ver lo importante que era mi madre para mi, aunque aveces sea inprudente y pesada.

3 comentarios:

  1. A si que un sueño, ¿no? Jajajaja. Ya decia uqe era mucha suerte XD

    Que triste lo del padre

    saludos

    ResponderEliminar
  2. mass!!! yo tambien quede como que!! un sueño??!! jajaja!! me gusta tu trama :D
    si qieres te pasas por mi blog an-gelguardian.blogspot.com
    sigue asi :D

    ResponderEliminar
  3. ojala siguieras escriviendo?
    porque no lo haces, eres muuy bueunaa:P
    un besoo

    ResponderEliminar